>Presuntos narcomenudistas fueron ejecutados en pleno centro de la ciudad de San Juan de Abajo, municipio de Bahía de Banderas, por hombres armados con rifles de alto poder. Con un grupo de camionetas los sicarios cerraron la calle donde se ubica una narco-tiendita y ultimaron al primer sujeto.
Casi a las 3:30 de la tarde, por la calle Morelos y en el interior de la finca marcada con el número 60 entre las calles 5 de Febrero y 16 de Septiembre se localizó un cuerpo sin vida, boca abajo, del sexo masculino, de aproximadamente 35 años de edad, el cual presentaba varios impactos de arma de fuego en la cabeza, espalda y costado izquierdo.
Aquí se ubicaron seis casquillos del calibre 7.62 x 39 (AK-47), dos casquillos del calibre .223 (R-15) y uno del calibre 9mm, en el interior de la finca se localizaron 14 casquillos del calibre también de AK-47 y un cartucho del mismo calibre, así como una bolsa de plástico conteniendo en su interior 50 bolsitas de plástico transparente que a su vez contenían un vegetal de color verde al parecer marihuana.
En el patio trasero de dicha casa se localizaron otros cinco casquillos del calibre 7.62x39 (AK-47), y otra bolsa de plástico con más marihuana.
Una granada de fragmentación color verde también fue localizada en esta finca.
En el segundo escenario del enfrentamiento, por la avenida Lazado Cárdenas frente al número 62 entre las calles 5 de Febrero y 16 de Septiembre se localizó un cuerpo sin vida, boca abajo, del sexo masculino, el cual presentaba varios impactos de arma de fuego en la cabeza, espalda y costado derecho.
Este otro cadáver, según testigos en vida respondía al nombre de José Quirino Hernández Gutiérrez, de 38 años de edad, originario de La Quebrada, municipio de Compostela y vecino de San Juan de Abajo.
En el lugar fueron localizados ocho casquillos del calibre 7.62x39 (AK-47 “cuerno de chivo”), ocho casquillos del calibre .223 (R-15) y uno del calibre 9mm. En la pared 12 impactos de bala.
Por la misma avenida en la entrada a un taller mecánico ubicado a un lado del número 75 la Policía Estatal localizó abandonada un fusil de asalto tipo AK-47 de los denominados “cuerno de chivo” abastecido con un cargador y 39 cartuchos útiles al calibre.
Relatan testigos presenciales que observaron cinco camionetas que llegaron al primer domicilio, empezando el enfrentamiento y uno de los presuntos narco-menudistas trató de huir por la parte trasera a través de las azoteas para salir a la avenida Lázaro Cárdenas donde abandono el “cuerno de chivo” y metros adelante fue acribillado por las mismos presuntos sicarios quienes concluida su misión, rápidamente escaparon.
Ambos acribillados quedaron con el rostro impresionantemente masacrado por los impactos de bala.
Algunos vecinos, aseguraron que hasta a una casa del alcalde Héctor Paniagua le habían tocado los impactos de bala durante la persecución y que un tercer sujeto había caído por la balas, pero éstas primeras versiónes fueron descartadas.
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