Le urgen a Nayarit abogados postulantes eficaces

>• Cambio de paradigma en la formación del abogado nayarita

Soy de la generación 1989-1994, de las últimas que se instruyeron bajo la férrea disciplina pedagógica de "servir al Poder" de la entonces "Escuela Superior de Derecho" de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN). Y tiene su explicación y justificación histórica.

Como antecedente remoto a la hoy variada oferta educativa para cursar la Licenciatura en Derecho, debemos situarnos que en la época de los sesentas solo existía en Tepic, y todo Nayarit, la Escuela de Jurisprudencia donde el alumno cursaba hasta segundo o tercer año y luego continuaba sus estudios por lo general en la Universidad de Guadalajara y así obtenía su Título de Licenciado en Derecho.

A principios de los setentas se consolida la creación de la Universidad Autónoma de Nayarit y por consiguiente se establece la "Escuela Superior de Derecho" con un plan de estudios terminal; por lógica la planta docente se compone de Licenciados en Derecho que servían al Estado, ya que en esa época solo se podía subsistir en Nayarit trabajando para el campo, el comercio de naturaleza abarrotera y de burócrata en el gobierno ("gobierno" en sentido amplio: toda institución u organismo que recibe subsidio público y de él paga los sueldos de sus empleados), es decir, la maldición de vivir en una economía primaria.

Obvio que al tener los catedráticos de la entonces "Escuela Superior de Derecho" un compromiso político con el gobierno del Estado ya que de él obtenían prebendas como el otorgamiento de Notarías o eran "Hombres de Gobierno" y por ende "dobleteaban nómina" ya que aparte de ser catedráticos eran magistrados, jueces, diputados, presidentes de ayuntamientos, altos funcionarios, profesores normalistas, etc., entonces la formación que le inculcaban a sus alumnos era la de servir al Poder, en específico al Poder Público, pues solo así al egresar podían obtener un ingreso oficial que les permitiera subsistir o ingresar a la estructura institucional; imperaba la máxima de que "vivir fuera del presupuesto era vivir en el error (más bien en la ignominia)" pues el gobierno del Estado era principio y fin de todo en Nayarit, o la diferencia de vivir en la medianía (en ese tiempo, salvo los del "círculo dorado" del gobernador en turno, los sueldos eran a nivel subsistencia) o literalmente morirse de hambre.

Además, en ese tiempo imperaba un régimen poco tolerante a cualquier forma de crítica por mínima que fuera y en el lugar que fuera, y obvio que Derecho no era la excepción, los catedráticos eran sumamente cuidadosos en realizar cuestionamientos al establishment, así los estudiantes con nula formación proveniente del hogar o del exterior se instruían bajo un esquema de servicio al Poder y la consecuencia era el poco litigio en el Estado pues casi todo el mundo quería trabajar o subsistir del gobierno, máxime que en esos tiempos todo tipo de controversia se resolvía políticamente, no jurídicamente.

Los tiempos están cambiando y la economía en Nayarit se está diversificado y tan así que ahora no solo la Universidad Pública brinda la posibilidad de cursar la Licenciatura en Derecho, sino que hay variadas ofertas educativas del sector privado, también los estudiantes del norte, sur y rumbo a Bahía de Banderas tienen cerca de sus lugares de origen algunas escuelas superiores con dicha carrera. El monopolio que durante decenas de años tuvo la hoy Unidad Académica de Derecho de la UAN, mi querida Alma Mater, se ha terminado y ante esto solo queda subsistir a través de la excelencia académica.

Pero el cambio más relevante en el proceso escolar de los abogados nayaritas es en su paradigma formativo: poco a poco empiezan a vislumbrar (conforme al desarrollo económico del Estado) que el gobierno (en sentido general) no es ya el único empleador sino que el ejercicio libre de la profesión es una alternativa válida de subsistencia y de desarrollo profesional integral, es cierto que muchos abogados desde hace bastante tiempo se han desarrollado en la postulancia, pero es ahora en que se empieza a notar que al estarse transformando económicamente Nayarit se abre la posibilidad de que surja "el litigio" como la forma más enriquecedora del ejercicio profesional del licenciado en derecho: un abogado libre de todo tipo de atadura y que al ser eficaz en sus pretensiones jurídicas honre la profesión.

A Nayarit le urgen "abogados postulantes eficaces", el modelo de "licenciado en derecho" (por más posgrados que se tengan) es obsoleto, porque lo obsoleto es la formación burocrática de servir al Poder.

El futuro en el campo jurídico lo determinarán los "abogados postulantes eficaces", ni los jueces (incluyendo en éste término a magistrados y ministros) ni los investigadores "marcarán línea" y no podrán hacerlo porque no dejan de ser burócratas: unos al servicio del gobierno y otros al de la Universidad, pero burócratas al servicio del Estado a fin de cuentas.

* Abogado, Magistrado del Tribunal de Justicia Administrativa de Nayarit, Maestrante en Derecho Público por la Universidad Panamericana-Campus Guadalajara.

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