El triunfo del PRI en el estado de Colima, nos ofrece dos grandes lecciones, obvias. La primera es lo inútil de repetir las elecciones dos veces para obtener el mismo resultado, con un gasto estratosférico. Impugnaron los procesos electorales acusando a las autoridades de convertir las jornadas electorales en verdaderas porquerizas, en el que los chanchitos de todos colores, retozaron alegremente.
Se volvieron a realizar y pasó exactamente lo mismo, un lodazal del que difícilmente alguien se salva de salir manchado. La pregunta es si ambos bandos saben cómo son los de enfrente, por qué no cuidaron que no les repitieran la misma medicina? Se ocupa estar muy bembo para acusar “me hace trampa el otro” y luego que te vuelvan a ver la cara de tarugo.
Y es que todos, absolutamente todos, hacen trampas de todo tipo. La llamada guerra sucia en todo su esplendor. Sumémosle en despilfarro de estar repitiendo elecciones, con grandes dispendios de los dineros públicos y veremos en tamaño de la estupidez. Ya ni la chingan.
La otra lección
La otra lección es obvia también. Demostrado está que si las oposiciones no se unen en alianzas sólidas el PRI les gana. PAN y PRD no pueden con el tricolor si van separados en las elecciones.
Aunque muchos criticamos lo paradójico de unir izquierdas y derechas, quienes tienen visiones diametralmente opuestas, los fenicios que dirigen a los grandes partidos todo lo sacrifican (La ideología, los puntos programáticos partidistas, las convicciones) en aras de lograr el poder o retenerlo.
El botín subordina cualquier cuestión y el pretexto de “no permitir que la dictadura priista siga gobernando”, los une. Y lo terrible es que cuando se unen panistas y perredistas, postulan como candidatos a ex priistas, haciendo un coctel extraño, en el que la esquizofrenia es evidente.
Esa siempre ha sido su bandera, haciendo creer que el PRI es una especie de medusa mitológica a la sólo se le puede ganar haciendo que mire su propio reflejo. Y por ello, en su gran mayoría los gobiernos emanados de tales alianzas gobiernan a la usanza del PRI, con funcionarios que son de corazón priista. Da risa pero así es. Y al parecer, no tienen otra forma de ganar.
Audio de una conversación aparentemente entre el abanderado del PAN al gobierno de Colima, el senador con licencia, Jorge Luis Preciado y una mujer a quien se identifica como Isis Amaya Baltazar Martínez, quien supuestamente sostiene una relación sentimental con el candidato blanquiazul, quien -según el audio- la obliga a practicarse un aborto.
Esta grabación fue parte de la "guerra sucia" que se vivió en las elecciones extraordinarias para gobernador en Colima.
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