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En el poblado Cinco de Mayo era común verlos pelear, dijeron los vecinos.
Tepic.- Vecinos aseguran que los problemas familiares eran cada vez más evidentes, y de un tiempo a la fecha las discusiones fueron en aumento, lo que nadie pudo prevenir es que las agresiones verbales dieron paso a las físicas con resultados fatales.
El reloj marcaba las 17 horas con 10 minutos de este domingo 30 de abril, cuando los habitantes del poblado Cinco de Mayo, Municipio de Tepic, escucharon una fuerte discusión en la casa marcada con el número 4 de la calle Josefa Ortíz de Domínguez, seguida de un silencio y después varios gritos de alarma.
En el lugar, la madre de Octavio Vélez Pérez, de 38 años de edad, originario de Bolaños, Jalisco, encontró el cuerpo de su hijo tirado a un costado de la cama, con una herida en la frente provocada por un machete, ya sin vida. Se supo entonces que el presunto agresor de Octavio había sido su propio hermano, Osvaldo, de 40 años, quien también vivía por la calle arriba mencionada en una casa sin número, y del que no se encontró rastro alguno.
La madre de los hermanos Vélez Pérez narró ante elementos de la Fiscalía General que sus hijos tenían ya tiempo con fuertes rencillas, y en esta ocasión ya nada pudo hacer debido a que no se puede mover mucho; sin embargo, alcanzó a ver que el mayor de ellos todavía traía entre sus manos el machete con el que presuntamente le quitó la vida a su hermano.
Por el momento las investigaciones continúan para determinar cómo fue que sucedieron los hechos.
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