• Esto es lo que sabemos hasta ahora del caso de los preparatorianos, cortadores de mango y aguacate del pueblo de La Yerba, que fueron privados de su libertad por un grupo armado.
Tepic. - Los tres jóvenes del poblado La Yerba que fueron plagiados el fin de semana pasado por un grupo armado, son estudiantes del Centro Educativo de Tele-bachillerato Comunitario La Yerba y trabajadores en el corte de mango y aguacate, al igual que el muchacho asesinado que los acompañaba.
Joan Hernández y Luis David Álvarez Silvestre, de 15 años de edad y cuyos padres hicieron públicos sus nombres, hace unos meses concluyeron la secundaria en la escuela Sor Juana Inés de la Cruz y recién ingresaron a cursar la preparatoria.
El tercer joven que se llevaron a la fuerza, se llama Jorge Luis López Méndez, de 19 años de edad, tenía poco de haber terminado el bachillerato y su deseo era continuar con sus estudios en la Universidad Tecnológica, pero debido a su situación económica no le fue posible.
El cuarto joven, quien fue asesinado, se llamaba Luis Silvestre Gómez, de 18 años de edad, también era estudiante del mismo tele-bachillerato y estaba en el primer año.
Ha quedado descartado que una de las jovencitas haya sido plagiada como se propagó inicialmente en Facebook.
EL ATAQUE
Los cuatro, entre el sábado por la noche y el domingo por la madrugada, estaban reunidos con unas jovencitas en la plaza pública de La Yerba a quienes ofrecieron llevarlas al poblado cercano de Mecatán, de donde son originarias las muchachas.
En el camino de regreso y ya en la madrugada del domingo, hombres armados atacaron a balazos a la camioneta donde viajaban, dando muerte a Luis Silvestre Gómez, mientras que a los otros tres adolescentes se los llevaron por la fuerza.
Familiares y vecinos de esta comunidad de poco más de mil habitantes, perteneciente a Tepic y ubicada por la carretera a Miramar, indican que los cuatro jóvenes no estaban involucrados en actividades ilícitas, por lo que emprendieron una campaña en la red social Facebook para dar con su paradero, además de denunciar el suceso ante las autoridades.
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